Los peines Don Porfirio son hechos a mano de principio a fin, sin molde, sin maquinas, sólo las hábiles manos del artesano y la madera.
El trabajo se realiza sobre palo de Naranjo, dándole una resistencia natural contra el agua.
Por si fuera poco, cada uno de los peines es sometido a un tratamiento con el Tónico Don Porfirio, otorgándoles un aroma espectacular y ayudando a suavizar y humectar el vello con cada uso.